Evité a mi hermanastra nigeriana hasta que me dejó penetrarla con mi gran pene

Había estado evitando a mi hermanastra de Nigeria durante bastante tiempo, no porque no quisiera, sino porque no quería.Era un poco puta, siempre poniéndose en problemas y lo que no.Pero un día, finalmente cedió y me permitió penetrarla con mi gran polla africana.Era una vista para contemplar mientras gemía y se retorcía de placer, su coño apretado tomando cada centímetro de mi enorme eje.La vista de ella, una hermosa chica africana negra, de rodillas frente a mí, fue suficiente para hacer que cualquier hombre se debilite arrodillada.Su coño aprieta me dolía la gran polla negra, y estaba más que feliz de complacerlo.No solo fue una follada rápida, esto fue una cogida completa, una verdadera fiesta sexual africana que nos dejó a ambos sin aliento y satisfechos.